Homenaje
a Isidor Boix, el "sindicalista
valiente"
El sindicalista valiente, sí, hablamos de una persona real, de un veterano
sindicalista en activo, con una larga y fructífera historia de compromiso
con la lucha por los derechos políticos y laborales en España y los derechos
humanos en el mundo. Valiente, porque se necesita valor y también mucha
seguridad en su trabajo para levantar el dedo y pedir la palabra para dar una
opinión que va contracorriente de lo "políticamente correcto".
Eso es lo que ha hecho Isidor Boix Lluch al
matizar -y también contradecir-, al periodista Jordi Évole, una figura
mediática de las más reconocidas y prestigiosas de nuestro país, al poner en
cuestión el contenido de algunos aspectos del programa “Salvados” de “La Sexta”, emitido el pasado 21 de febrero sobre la industria de la moda, “Las
víctimas de la moda”.
Isidor Boix, responsable sindical en representación de la Federación Sindical Internacional “IndustriALL Global Union” y
coordinador de la aplicación del Acuerdo Marco Global que esta organización
tienesuscrito con el Grupo Industrial Inditex, expresa su
opinión crítica en un comunicado http://iboix.blogspot.com.es/2016/02/la-industria-de-la-moda-y-el-rigor-del.html donde desde el convencimiento de la
experiencia de trabajo, y la necesaria denuncia, afirma que es posible avanzar
en la conquista del trabajo “decente”.
La crítica más directa al programa "Las víctimas de la
moda" que hace Isidor Boix en su artículo es la ausencia de toda
referencia al trabajo sindical que están realizando, tanto IndustriALL
Global Union, como los
sindicatos locales de esos países, y muy particularmente en Camboya, con
fuertes luchas de los trabajadores y trabajadoras. Unas luchas en las que el
sindicalismo, nacional e internacional, presente en las empresas
multinacionales textiles españolas, ha sido parte muy activa en muchas de
ellas. Información, documentación y contactos que fueron ofrecidos, sin éxito,
a los autores del programa para su mejor investigación sobre las condiciones de
vida y de trabajo en Camboya y otros países asiáticos, pues hubieran
posibilitado un programa más completo y riguroso. Como
finaliza dicho artículo: "para que reaccionen los consumidores, los
trabajadores, los sindicatos, (…), toda la sociedad, para que las marcas
internacionales tomen nota, para que todos nos impliquemos más”.